¡ESTA PELI ES "LENTA"!
Hace algún tiempo, proyecte en mi cineclub del Arep la excelente "Al
Este del Edén", adaptación de la obra de Faulkner. Adaptación muy
resumida y comprimida. Vamos, que suceden muchas cosas.
Tuvimos el placer de contar con una pareja encantadora de adolescentes, cosa
no habitual. En mi prólogo entusiasta al film, me di cuenta de que no sabían
nada del Génesis, Adan y Eva, Cain y Abel y ese lugar al Este del Edén. Y la
chica era hija de una madre muy creyente... cosa que ya no significa nada, como
ven. Ansioso de que comprendieran la evidente analogía bíblica sobre los dos
hermanos, me explaye demasiado en esos orígenes creacionistas. Tanto, que un
espectador me pidió pusiera de una vez el film y luego, si acaso, lo
debatieramos. Tenía razón, claro.
Cuando terminó la proyección y encendí las luces (guiño a Hamlet que
nadie cogerá), no pude por menos que dirigirme a la pareja: "¿Qué os ha
parecido?", les pregunté con expectación... La chica me dijo "es...
¡muy lenta!", y el chico añadió, conciso: "¡Y hablan mucho!". Mi
gozo en un pozo.
Cada película conlleva su propio ritmo. Y encontrar el ritmo narrativo
adecuado (ojo, hay films que ya no siguen estructuras clásicas de narración) es
ya una lección de cine. Hay films que necesitan ser pausados, contemplativos,
frenéticos... Y hay también espectadores impacientes. Espectadores que no ven
determinados films, géneros y no están "educados" en propuestas más
"autorales". Y también espectadores que se han convertido en adictos
al cine atropellado, ese con mil y un cortes que intentan transmitir pulso y
vigor cuando en realidad uno no se entera de nada.
Ejemplo: yo veo una persecución de coches en cualquier peli de la saga
"Fast and Furius" y no me entero de quién persigue a
quién, de dónde aparece de repente un coche ni por qué calle, si uno está a la
derecha, otro a la izquierda, volantazos ¿hacía donde?.... Y me pierdo. Y veo
"Mad Max: Furia en la carretera", una persecución continua de
coches y motos durante más de dos horas y siempre distingo claramente la
ubicación y acciones de perseguidores y perseguidos, que hasta se alternan. ¡Y
de modo analógico!. Y dirigida por un octogenario, George Miller. Y qué
montaje, qué imaginario visual, qué acción más trepidante.... Espero haberme
explicado.
Por eso no entiendo lo de "películas lentas", aunque sé
perfectamente a qué se refiere la persona que me lo refiere. Si el film de Elia
Kazan, el que abría mi comentario, es lento y muy dialogado como defecto en sí,
paren el tren cinematográfico que me bajo. Estamos perdiendo a toda una
generación que desconoce prácticamente todo el cine (y autores, y géneros, y
propuestas de todo tipo, insisto) que no sea de éste siglo. Y que no sea
mainstream o hecho por logaritmos, añado.
Mi experiencia personal y la de mi entorno me han llevado a avisaros: dejad
de ver tiktoks, reels, storys y demás porquerías de videos de consumo rápido. O
lo que es lo mismo: "el internet" os está pudriendo el cerebro.
Y sí, seguramente los que leeis ésto seais las víctimas menos probables de
todo esto, porque al final sois gente a la que le gusta leer textos
relativamente largos que no repiten machaconamente la misma idea por la
esclavitud al SEO de Google o, peor todavía, que los haya escrito una IA. Hoy
en día tenemos multitud de webs de noticias -de las generalistas, de periódicos
«de verdad»- que hacen esa marranada, ¡como para no hacerlo en webs sobre
tebeitos o peliculitas! (sale mi vena friki). Pero ése es el internet al que hemos
llegado, el internet de los mensajes de 280 caracteres -originalmente eran la
mitad, no lo olvidemos- y el de los videos cortos de treinta segundos, uno tras
otro. Y éso es lo que me preocupa: porque lo que provoca el consumo de estos
contenidos es una estimulación inmediata del cerebro que lo vuelve adicto a esa
estimulación constante, hasta el punto de que si no la tiene en todo
momento se aburre, pierde el interés… Y la concentración en lo que se está
haciendo.
Y éso lo vemos constantemente si vamos al cine y vemos a alguien pagar una entrada para ver dos horas de película y en menos de una hora ya está mirando el móvil. Esas luces que antes nos parecían tan raras y maleducadas cada vez son más habituales, porque ya no es una cuestión de que les aburra la película en ese momento, es que son incapaces de mantener la atención el tiempo que dura una película; por eso nos estamos encontrando cada vez más a gente que no ve cine -dura dos horas- pero sí series, porque puede asimilar cada capítulo sin perder el interés (y con resúmenes constantes). Y no, no tengo un título ni un estudio que respalde mi hipótesis, pero para mi cada vez es más una certeza. Lo que es peor, como buen científico loco lo he experimentado conmigo mismo.
Claro, no creo que yo sea un caso extremo. Quiero decir, nunca fui un
consumidor compulsivo de reels de esos, ni he llegado al punto de ser incapaz
de leer un libro o de supuestamente leer artículos/cómics en diagonal y luego
criticarlos enfurecido por internet (hoy en día pasa muchísimo), algo que he
visto frecuentemente durante los últimos quince años de internet. Que puñetas,
está la teoría de que el 51% del tráfico de internet son bots (lo cual
probablemente es verdad) y está claro que la comprensión lectora de un bot da
para lo que da. Pero aun así, lo importante de todo esto y lo que espero que se
queden todos los que no tienen un transtorno de deficit de atención
y todavía son capaces de leer sin perder el hilo, es hacer un aviso a
navegantes de que sí, estamos perdiendo la capacidad de concentración porque,
como decía Marty McFly, el futuro nos está volviendo gilipollas.
Ésta compulsión por los mini videos rápidos sólo lleva existiendo menos de
diez años, hasta el punto que cuando se lo he comentado a alguna gente -que
espero que no lea esto, porque lo mismo me deja de hablar- hasta se lo han
tomado mal, pero… Tened cuidado, ¿vale? Los estudios que hay hasta ahora ya
dejan entrever que nuestro cerebro no está creado para recibir tanto estímulo
constante, que los diagnósticos sobre transtornos de poca capacidad de
concentración entre la chavalería y no pocos adultos, cada vez son cada vez
mayores, y aunque esté de moda autodiagnosticarse barbaridades -todo lo que
busques en google es cáncer- no está de más recordar que leer un libro siempre
fue relajante y te hace ser mejor persona. Sí, al menos más reflexiva, ahora
que hay una campaña de influencers jactándose de no leer.
Odiaría modificar mi cerebro hasta el punto de ser incapaz de leer un libro,
de disfrutar de una película que me agarre durante tres horas o de perderme en
un buen cómic y tampoco os lo desearía a vosotros. Lo que es peor, mi otra
hipótesis es que una «neurona impaciente» no es una neurona observadora, con lo
que una persona que se aburra o se distraiga fácilmente es incapaz de leer
matices, subtextos y de disfrutar realmente de una buena historia y se queda
solo en la superficie. Y eso me aterra profundamente porque, sí Marty, en
el futuro nos volvemos gilis. Para entendernos, podéis seguir viendo vuestros
videos de usar y tirar, pero todo con mesura. Y por favor, seguid leyendo
libros y cómics, y ver films de Truffaut, Chaplin, Nolan y George Miller, que
son lo que nos mantiene cuerdos.
Cuando hemos llegado al punto de que es imposible ir al cine sin que algún
desgraciado encienda el móvil y se ponga a «scrollear», cuando precisamente la
gracia del cine se supone que es aislarte del mundo para centrarte solo en la
película… ¡Apaga y vámonos!
Sí. Muchas gente no tiene ya capacidad de fijar la atención en nada.
Una lectura de un texto medianamente largo o minimamente sesudo es una
tortura para muchos, incapaces de entender de qué van las cosas. El trasfondo o
sentido de la película por ejemplo. Ojo, también me he de incluir por bastantes
debilidades que me dicen "qué objetivamente mala es ésta peli pero cómo me
gusta verla una y otra vez".
Prima la inmediatez absoluta. Cualquier mención a algo del año
pasado, y se sorprenden de tu memoria y de tú interés en irte a algo tan viejo
que ya a nadie le interesa. Es la simplificación absoluta del pensamiento. Todo
es magnificado, sin matices ni segunda opinión. Y cuanto más exagerado, más
verdad absoluta creen tener. Son los que pontifican, como yo.
Se ve perfectamente la ruptura del pensamiento crítico y científico. Se ha
perdido la capacidad de introspección. Algunos no leen o miran buscando conocer
el mundo, sino exigiendo al mundo ser un espejo de ellos.
Y digo chavalada porque ejerzo de abuelo Cebolleta. Pero pasa a todas las
edades.
Respecto a los reels, pienso igual, pero creo que es una batalla perdida,
las nuevas redes sociales cada vez tienen menos texto, los vídeos cada vez son
más cortos para favorecer que veas uno tras otro… ésto va a cambiar (ya lo está
haciendo) nuestra forma de hacer/ver/disfrutar de las cosas y es casi
irremediable.
El otro clavo en el ataud del pensamiento es la IA, ya hay estudios sobre
cómo su uso frecuente disminuye la capacidad cerebral. Es evidente. Hoy acabo
de asistir a una reunión de padres en la escuela de mi hija (¡espero sigas
siendo cinéfila de pro y sin prejuicios, muac!) y me dicen que ya algunos
Treballs de Recerca no llegan a su exposición oral al estar realizados
íntegramente por IA. Vamos, que los profesores han de hacer cursos para
reconocer al "enemigo".
No, no creo haya pelis "lentas". Sí creo que existen pelis con un ritmo desigual y equivocado. Con buenos profesionales, cada historia encuentra la mejor manera de contarse. Evidentemente , luego están los gustos propios y los films que uno acostumbra a ver. ¡No me sean impacientes!.



Si..no hay películas lentas, sino público impaciente y ansioso.En todas las pelis d Mad Max hay persecuciones d vehiculos...Toda la estética punk y postapocaliptica se lo deben a la 2a parte. Mi favorita con Humungus. Y si, la gente ya no lee y no puede despegarse d l móvil...la prolongación d la mano. Me resisto aún a la I.A., soy un anacronismo
ResponEliminaHola, querido Koto. Aprovecho para corregirme yo mismo un gravísimo error en el artículo: FE DE ERRATAS.- Al Este del Edén es de JOHN STEINBECK, y no Faulkner. Aunque, como me ha señalado mi amigo, de Nobel a Nobel. Ya pueden fustigarme los literatos. No, ya lo hago yo, que tengo mucho complejo de culpa.
EliminaY si, la imaginería visual de Miller en la saga Mad Max ya está en la segunda parte, todavía con Mel Gibson, y que no ha envejecido nada. Au contraire.
Si tú eres un anacronismo, yo, como hacen los japoneses con las continuaciones de sus series de anime, soy un APOCALIPSIS Z.
Buen artículo, a parte de coincidir en todo, me encanta la honestidad y la autocritica. Ah y también el error y su corrección. Dicen que no hay creatividad sin aburrimiento...y el aburrimiento es vital para la inteligencia.
ResponEliminaEs que vaya error el mío, Lola. Yo he de decirte que con tantos inputs ya desde pequeño no recuerdo haberme aburrido nunca, si acaso procrastinado sí.
EliminaNada nada grave, a mi me has hecho buscarlo porque no recordaba que fuera de Faulkner, así que me has sido muy útil, gracias!
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