El nido del cuco 24-05-2024

 




VAMPIROS EMOCIONALES

Uno no es terapeuta. Ni exorcista, muy a mi pesar. Mi talento es escaso y pasa por reconocer las buenas historias. Hubiera sido un pésimo abogado, con lo legalista que soy, y los números me confunden.

Lo que se me da muy bien es ser presa de los vampiros emocionales, ya me lo advirtió mi madre de pequeñito. Y no tengo estacas para defenderme de ellos.

No crean, uno ha hecho daño a los demás. Los tengo muy presentes: a una compañera de mi amigo Julio, a mi papi y mami por motivos diferentes (en este caso fue mutuo el daño), a Begoña, una vez a mi más que amiga Ángeles y  me he enfadado con Uri (paciencia la suya) y con mi propio hermano, al que tanto quiero.

Teniendo presente ésto, que lo arrastró conmigo por ese gran sentimiento de culpa que tengo, gana el daño que me han inflingido los demás, si me permiten la inmodestia. Y son mayoría los que creen que no han hecho ningún mal. Cuestión de orgullo y supervivencia.

Los vampiros emocionales, lo sabe Van Helsing, no anhelan nuestra sangre sino nuestra energía emocional. Suena un poco dramático, pero a nivel coloquial es un concepto muy empleado. Dichos vampiros son personas que se van introduciendo en nuestras vidas y tienen el poder de exasperarnos, hipnotizarnos e incluso seducirnos con falsas promesas. Podríamos afirmar que son personas que nos atraen para, posteriormente, vaciarnos el alma, el esfuerzo, la alegría y quieren nuestra preocupación y cuidados. Y que no les llevemos nunca la contraria...

QUIENES SON

¿Existe alguien a quién evites o rehúyas? ¿Quién es aquel a quién tanto te cuesta devolver la llamada porque ésta sola idea te agota? Tras los encuentros, digamos, agradables con esa persona, ¿te sientes tenso, agobiado o molesto sin detectar los motivos? Si en alguna contestas que si, cuidado, pregúntate si hay algún Nosferatu en tu vida.

Podemos distinguir diferentes tipos de vampiros emocionales, pero no se parecen entre sí. En otras palabras, algunos de ellos pueden no ser conscientes de lo que realizan y el impacto que conllevan. En cambio, otros buscan de forma consciente la dominación y reforzar su autoestima.

A pesar de esto, tienen características similares tales como la inmadurez o regirse por la regla de “Mis necesidades son más importantes que las tuyas”, con todo el egoísmo de los depredadores.

TIPOS

Algunos de los vampiros con los que nos podemos encontrar son:

El vampiro criticón son aquellas personas que pondrán objeción a todo aquello que digas o hagas. A pesar de que argumenten que “es por tu bien” expresando un cariño falso, nunca verán adecuado cualquier pensamiento que propongas y harán que acabes sintiéndote inferior a él/ella. Hay que procurar ignorarlos, tener autoestima (ay) y santiguarlos.

El victivista, que todos somos un poco, expresa un continuo malestar y negatividad. Son los del “siempre me pasa todo a mí”. Hay que decir que algunos tienen razón, en su descargo. En este caso hay que ayudar a que encuentren la solución a los problemas y los racionalicen, para que dirijan su vida y no esta a ellos. Los que te quieren de verdad intentarán paliar tu dolor así.

El narcisista es hoy muy frecuente. Su único foco de atención e importancia son ellos mismos: “yo primero, luego yo y después... yo. Evidentemente, se sienten superiores a ti en todos los temas y actitudes en la vida y odian que alguien parezca sufre a su altura. Estas personas tienen poca capacidad de empatía, por este motivo, les cuesta reconocer las emociones de los demás. Al final, nos obligan a realizar las cosas bajo su prisma y principios. Como nuestra autoestima saldrá dañada y tendremos que anular parte de nuestra idiosincrasia, tendremos que ponerle límites con mucho tacto. En mi caso, buscar alguna manera de huir.

El irónico (muy inteligente) emplea la ironía como herramienta sutil para ridiculizar y humillar con sofisticación al otro. Como no es empatico/a tendríamos que manifestarle su agresión sutil y su consecuencia emocional en nosotros. Conversaciones que suelen acabar mal. Arrojar agua bendita.

El bocazas es una persona que no se muestra interesada en lo que tú le argumentas. Son habladores incansables o callados profesionales. Perdonar si están deseosos de ser entendidos o no tienen muchas personas en las que confiar. También disculpar a quien siente que se le va a culpar. Y a los que escuchan a todos y masacran a 5 desafortunados. Vaya, qué indulgente soy con ellos... Hay que intentar hacerles ver la necesidad de escucha mutua.

El controlador, pues eso, controla todo aquello que le rodea, incluso a los otros. A través de la manipulación te anulan, disminuyendo la autoestima, identidad y positividad. Su manipulación y control no se sacia hasta que consiguen lo que quieren. Mucha vista y autoconfianza ante ellos. Tener a mano ajos.

El agresivo, emocional y físicamente, es muy difícil de controlar. Y no se le puede llevar la razón en todo. Hay que distanciarse y no darle permiso para entrar en tu casa. Autocontrol.

¿Soy un vampiro emocional? Pues yo creo que en algunos momentos hemos podido identificarnos con alguno de éstos comportamientos. Lo que yo agradezco es el esfuerzo en pensar 'He actuado bien' '¿en qué he fallado?' y también, porqué no, 'tenía razón y un vampiro menos', mera cuestión de supervivencia. Preguntas sinceras que sólo pueden hacerse personas con dudas y autocriticas. Todos podemos ejercer de vampiros con alguien.

EVITAR

Necesidad de control. No asumir ideas distintas a las tuyas (ojo, la verdad es la verdad y la mentira, mentira).

Dificultad para dejarse ayudar.
Pensamientos catastróficos...
Necesidad de desahogo con las personas que nos rodean sin tener en cuenta sus sentimientos o preocupaciones. Confiar en los que se lo merecen y te han mostrado su cariño. Autocensurarse en algún tema para evitar conflictos.

Y, por supuesto, mirar la imagen del otro en el espejo. Y la tuya, si la comienzas a ver borrosa, pensar en sí tienes vista cansada o necesitas esclavos.

Porque un vampiro emocional necesita siervos, esclavos en los que mandar y apoyarse. Y hacerles sentir su enfado si intentan ponerse a su altura.

Y ya está. Leerse 'Soy Leyenda' o 'Quién teme a Virginia Woolf?' para profundizar. 


Comentaris

  1. Si...lo ideal es conocerte primero a ti mismo, vert en el espejo como dices ( si no hay reflejo, malo), protegerte con ajos ( ahuyenta) y evitar toxicidad intentando star con personas positivas, esto es como la luz solar

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    1. Hola, querido Koto. Recuerda que, en nuestra sociedad, cada vez más carente de valores y mucho menos religiosas, la cruz y el agua bendita ya no sirven de nada.
      Te ojo, sobre todo. Y cuidado.

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  2. Que bien escribes, canalla! Y Lugo dices de mi... Que dominio del lenguaje. Es un gusto meterme dentro de tus -historias verdaderas-

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    1. Gracias Manel. Tú también tienes varios talentos. Entre ellos, la amabilidad y buen humor. Y tu capacidad innegable de integrar tus vivencias en tus textos, a veces camufladas, pero que hacen sean todos personales y auténticos. Y no es fácil.

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