El nido del cuco 04-03-2022

 

PLAYLIST

Aunque parezca mentira, hace unos días, sólo unos días, compré unos auriculares (con cable, ya anticuados, como comprobé cuando me fijé en quienes los llevan hoy) para escuchar música a través del móvil. Pensé que así se me harían más ligeras mis (pequeñas) caminatas y, sobre todo, podría desconectar del run run de mi poderoso cerebro, casi similar al del profesor Xavier.

Cuando llegue definitivamente la calor tendré que pensar dónde llevar el móvil, dado que no me convence la idea del bolsillo del pantalón (qué catástrofe perder o que te roben tu móvil, santuario de tus secretos y anhelos, templo de tu pasado y presente). Así que espero no dar un paso atrás y renunciar al cable en poco tiempo. 

Uno empieza a disfrutar al escuchar sus canciones favoritas y no simplemente tararearlas sin música detrás de una mascarilla que esconde tu playback callejero. No crean, he descubierto un nuevo peligro: estar menos atento y no escuchar a bicis y patinetes que vienen por detrás cuando te desvías lo más mínimo de un camino recto es sinónimo de aventuras letales.

Las canciones que guardo en mis "archivos / audios" son, supongo, eclécticas y dispares. Todas me animan, menos aquellas que disfrutaba con mi hija, que se convierten en parte de ese Retorno al Pasado que tan bien filmó Tourneur. Y es que ese pasado sigue siendo más bonito que mi lánguido presente. Aún así, en ese caso, la mayoría de las veces me hacen esbozar una sonrisa. Y me gustaría compartirlas con ustedes. He aquí las canciones que me acompañan diariamente:

1) SULTANS OF SWING (live London, 1985). Me cuesta pasar todavía de esta canción emblemática de Dire Straits a la siguiente. Es decir, es la primera que escucho y la que más veces repito. Y es que son 12 minutos de punteo imaginario imitando a Mark Knofler teniendo como contrapunto al saxo de Mel Collins (de ahí que la versión oficial del "Alchemy", sin vientos, me quede coja). Uno va por la calle moviendo rápidamente los dedos de su mano izquierda, imaginandose que puede replicar esa guitarra de sonido tan diáfano. Es la canción de los conciertos, la que uno toca mientras imagina te contempla tu hija, preguntándose cómo ha llegado a ser su padre tan virtuoso.

2) LA CULTURA (Kortatu). Es el gran tema del primer disco de la banda vasca. Una adaptación de.. una página de cómic de Robert Crumb! (concretamente de su gato Fritz, tan contracultural él). En la canción, si no conoces su procedencia, extraña escuchar cómo está dirigida a un cerdo, el estudiante Revilla. Supongo que quien no haya leído el tebeo pensará que se trata de un apodo despectivo a un compañero imaginario, y no, es literalmente un cochino. La ironía de la letra reside en que, a pesar de la gran crítica a dejar pasar la vida mientras uno estudia, Crumb es doble licenciado. La omnipresente trompeta marca el ritmo punk / ska del tema, de tal manera que uno va meneando los hombros y cabeza por la calle. Siempre tarareo sus dobles coros, imaginando que mi hermano me acompaña: "Uno cree que aprender es importante" y "Uno se pasa años y años". Dos minutos de vértigo.

3) NOWHERE FAST (de la Bso "Calles de fuego"). En este temazo rockero ochetentero de la peli de Walter Hill, uno se imagina es un guitarra que viste americana con hombreras y hace coros a una guapísima Diane Lane desbocada. Siempre imagino a mi hija viendo a su padre en éste ficticio concierto pensando "menos mal que canta una chica". También me imagino (uno imagina mucho, ya ven) que lo presencian moteros chungos con la cara de Willem Dafoe. Tres minutos y medio de mover caderas por la acera.

4) THEME IRON MAN 3 (Brian Tyler). Aquí uno no toca ningún instrumento, sino que va soñando pequeñas imágenes que acaban en foto fija para los títulos de crédito finales de una película ficticia escrita y dirigida por el menda. Sobreimpresionados, los nombres de sus protagonistas, con efectos visuales que semejan viñetas de cómic. Todo con un montaje frenético, funky setentero con muchos vientos. Muy friki todo. Así, voy poniendo caras y miradas detenidas en el tiempo mientras camino, poses para un film repleto de acción. Mis amigos / as protagonizan las escenas. Soy un espectáculo andante. Como ven, siempre introduzco a personas queridas en mis andanzas callejeras. Intentos de combatir la soledad.

5) TSUBASA OPENING. Si, el tema original de la antigua serie de animación "Campeones / Oliver y Benji", emitida tiempo ha por una primeriza Tele5. Ojo, no el opening en castellano, no, el tema cantado en nipon con ese riff guitarrero tremendo que acompañaba a los chicos del Muppet mientras subían a rematar goles en esos partidos interminables y de campos que medían kilómetros entre portería y portería. Uno se imagina que su hija asiste a ese espectáculo adictivo y ve a su padre parar cañonazos a la escuadra volando de poste a poste. Imposible no acelerar el paso. Viva el anime.

6) COBARDE. Primer tema que uno se limita solamente a cantar. Canción pop, con arreglos discotequeros del gran David Bustamante. Uno, romántico como es, se imagina declamando a esos amores perdidos. Su hija le sigue viendo en ese concierto imaginario y piensa que desafino. Por ahora, la mascarilla oculta mis labios que hacen karaoke con la letra. A veces puede ser interpretada como dueto con David, él canta unos trozos, yo canto otros.

7) THEME ULISES 31. Esta gran canción, que abría la célebre serie de animación (si no la conoces alégrate, eres un jovenzuelo), era elegida por mi viejo compañero Sergi, oh gran maestro, para dar por finalizada nuestra jornada laboral desde su ordenador. Cada día, a las 19,30 sonaba este temazo que imitaba la etapa de Bowie como Ziggy Stardust, con la poderosa voz de Constantino Romero desglosando esta Odisea espacial. Voy andando e imagino secuencias de ficticias luchas con espadas láser y reencuentros emotivos entre los personajes (sin fotos fijas). Como en su momento, parece que el día comienza para ti, aunque sea a horas intempestivas.

8) SMOOTH OPERATOR. Me enamoré del suave pop-soul de Sade allá por los ochenta. Este tema fue el primer single de su álbum de debut y me resulta imposible escucharlo y no rememorar su elegante videoclip promocional, en la época en que todos, todos los temas elegidos como sencillos radiofónicos tenían su equivalente visual. Me resulta ahora imposible que ésta lánguida canción llegue al número 1 de los 40 principales, como fue el caso. Aquí, uno espera los solos de saxo para tocarlo, mientras sus manos acarician el instrumento más sensual que existe.

9) SACRIFICE OF THE OMEGA MEN (de la Bso "El último hombre vivo"). Este tema tiene obligatoriamente que acompañar el caminar nocturno, cuando los mutantes sobrevivientes a un virus mortífero te capturan y llevan a una pira para quemarte vivo. Miras a un lado y al otro de la calle para ver si puedes escapar de ellos, más o menos como de las bicis y patinetes, los enemigos actuales. Tema inquietante y peligroso, ideal para calles vacías. Me mantiene alerta y despierto mientras voy llegando a mi hogar - refugio. Abstenerse de escucharlo en calles transitadas y con mucha luz.

10) ROCK AND ROLL STAR (live TVE, 1985). Siempre, siempre me imagino cantando esta balada rock de Sabino Méndez con mi hija, no en vano lo escogió ella misma para practicar canto en la escuela musical a que acudía. Ésto sí que es un dueto en toda regla!. Es un momento de calma entre tanto movimiento espamodico, un momento de nostalgia, pero nunca de pena. Y es que tuve suerte de llegarla a conocer. Muy aconsejable ponerse mascarilla para poderla cantar en modo playback.

11) THE BOY OF THE SCHOOL (Hot Chip). Esta canción de pop electrónico la descubrí en un capítulo de los Simpsons, cuando sonaba una y otra vez mientras Bart repetía sus quehaceres habituales en su colegio, teniendo la sensación que sus días eran todos iguales, repetitivos. A mí me produce una sensación parecida, la de recorrer la misma senda (que has de volver a pisar mañana) cada día, viendo si te topas con la misma gente a la misma hora. Es una canción que invita a fijarte en los pequeños detalles, y por eso mismo tranquilizadora y pegadiza. Voy ralentizando el paso...

(continuará)